Te voy a hablar un poco de la presión de escribir.
Existe la creencia equivocada de que las actividades artísticas son actividades que te tomas a la ligera y son para relajarte y terminar tus proyectos cuando quieras.
Si lo tomas como hobby sí, pero si quieres vivir de alguna actividad artística como por ejemplo, escribir, te tienes que dedicar en cuerpo a hacerlo.
Los escritores invertimos mucho tiempo, para terminar un proyecto. Muchos trabajan más de ocho horas (Lo que sería un horario de oficina), otros se trasnochan para trabajar a altas horas de la madrugada, otros muchos tienen un trabajo que le ayuda a pagar las cuentas mientras su proyecto toma vida y llegan a casa a sentarse a escribir.
Sin contar por supuesto, con los que tienen hijos, mayores a quien cuidar o personas a su cargo que a pesar de tener su tiempo comprometido, no cesan en su esfuerzo de sentarse a escribir.
Todo trabajo conlleva sacrificios y más si tenemos la presión de escribir un libro.
Si este trabajo es el sueño de tu vida, lo harás.
Si le preguntas a cualquiera que se dedique a las artes, su sueño es poder vivir de su trabajo, de lo que aman, como todo el mundo y para eso también tienen que someterse a una presión no muy diferente a cualquier otra profesión.
La mayoría de los artistas que se toman su trabajo en serio, se ponen deadlines. Los deadlines son tiempos de entregas del proyecto.

Lee mi entrada: Paciencia y Cuidado, porque además de la presión, los escritores tenemos que ser sumamente metódicos.
¿Qué a quién se los va a entregar?